Protección civil de Fuentes de Andalucía
Con la llegada del verano, con exposiciones
largas a elevadas temperaturas, éstas suponen una agresión directa a nuestro
organismo, existiendo el peligro de deshidratación, agravamiento de una
enfermedad crónica y el llamado “golpe de calor”, a sabiendas
que ninguna persona está exenta sea cual sea su cualquier edad.
¿Cuáles son las personas más
sensibles al calor?
·
Mayores de
65 años, que vivan solas.
·
Personas
dependientes en su vida diaria: alteraciones de memoria, de comportamiento,
orientación…
·
Personas con
enfermedades crónicas: diabetes, obesidad, problemas cardiovasculares,
respiratorios…
·
Personas que
toman medicación como: diuréticos, antihipertensores, antidepresivos…
·
Personas con
fiebre o patologías agudas
·
Personas que
hayan manifestado dificultad de adaptación al calor.
·
Lactantes y
menores de 5 años.
Foto: httpspt123rf.com
Es preciso dejar toda actividad
durante varias horas,
refrescarse y descansar
en lugares fresco,
beber agua, zumo de fruta.
Otras situaciones que aumentan el
riesgo
·
Soledad,
aislamiento social
·
Vivienda
difícil de refrigerar
·
Ausencia de
sistemas de refrigeración en la vivienda o escased económica
·
Ejercicio
físico intenso, deportes
·
Trabajos
ligados al calor
Síntomas de alerta
·
Aturdimiento,
pérdida de conciencia, convulsiones.
·
Aturdimiento,
pérdida de conciencia, convulsiones.
·
Insomnio y
agitación nocturna inhabitual.
·
Calambres
musculares en brazos, piernas y abdomen.
·
Rápida
elevación de la temperatura corporal, fiebre elevada.
·
Debilidad,
cansancio…
·
Fuertes
dolores de cabeza, nauseas.
·
Piel
caliente, roja y seca, sed intensa.
¿Qué hacer
cuando las temperaturas son tan elevadas?
Protéjase del calor
·
Evite salidas y actividades
en las horas de más calor y evite actividades físicas, deporte, jardinería,
etc.
·
Al salir a la calle, procure
estar a la sombra. Lleve la cabeza protegida, vestidos ligeros (algodón) y
amplios, de color claro. Lleve agua consigo.
·
Cierre las ventanas y
cortinas en las fachadas expuestas al sol.
·
Mantenga las ventanas
cerradas mientras la temperatura de la calle sea mayor que la de su casa.
Ábralas por la noche, para facilitar el paso del aire.
Manténgase fresco:
·
Permanezca en el interior de
su domicilio en las habitaciones más frescas.
·
Si no dispone de una
habitación fresca, permanezca algunas horas en locales climatizados en la
proximidad de su domicilio.
·
Durante el día, dúchese o
báñese varias veces para refrescar el cuerpo. También puede humedecer la ropa.
Con la bebida y la comida:
·
Beba lo más posible, incluso
sin sed. La mejor bebida es el agua, a temperatura ambiente, no demasiado fría.
Los zumos de fruta, la leche, o sopas frías como el gazpacho nos ayudan a estar
bien hidratados.
·
No consuma bebidas
alcohólicas. El alcohol deshidrata aumentando la sudoración.
·
No abuse de las bebidas
excitantes como el té o el café.
·
Coma, preferentemente fruta y
verdura, fraccionando las comidas a lo largo del día y en cantidades moderadas.
·
Evite las comidas calientes,
pesadas y copiosas.
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¿Qué es un golpe de
calor?
Aparece cuando el organismo no puede
controlar su temperatura y entonces aumenta rápidamente, con:
·
Piel caliente, roja y seca
·
Dolores de cabeza, náuseas, somnolencia y sed intensa
·
Confusión, convulsiones y pérdida de conocimiento
· Agresividad in-habitual. deportistas, trabajadores expuestos al calor, bebés,
personas mayores, personas discapacitadas o con una enfermedad crónica, son particularmente
sensibles a los golpes de calor.
Tenga en cuenta, que una persona víctima de un golpe de
calor está en peligro,
llame inmediatamente a los servicios sanitarios.
Mientras, sitúe a la persona en un lugar fresco,dele de
beber, aflójela la ropa,
mójela con agua fría o póngale toallas húmedas y
abaníquela.
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Efectos sobre el sueño del
exceso de calor
El exceso de calor
nocturno (supera 26-28 grados) produce interrupciones del sueño, la
consecuencia es una disminución del
rendimiento, irritabilidad y cansancio.
·
Si el aumento de temperatura es brusco las consecuencias son
peores, sensación de agotamiento, disminución de la calidad del sueño y mala sensación
térmica.
·
Especialmente afecta a personas que padecen insomnio.
·
Más importante en personas mayores (ciclos de sueño más
irregulares y superficiales, teniendo episodios de somnolencia durante el día).
Recomendaciones:
·
Horario regular de sueño.
·
Cenar regularmente a las mismas horas y de forma ligera (no
tomar alcohol, ni cafeína) y suspender actividades del hogar o el trabajo
reemplazándolas por la lectura o música.
·
Evitar comidas excesivas (esperar dos o tres horas antes de
meterse en la cama).
·
Siesta no superior a 30-45 minutos.
·
Mantener las habitaciones frescas.
·
Recurrir al aire acondicionado y si no se dispone de él,
duchas con agua tibia (no fría).
Cuidado de personas
mayores
Las personas mayores son
más sensibles al calor porque:
·
Producen menos sudor que una persona más joven.
·
La capacidad para regular la temperatura disminuye.
·
Su temperatura corporal puede subir más deprisa.
·
Se adaptan peor a las altas temperaturas.
·
La piel es más fina y es más sensible a los rayos del sol.
·
Las enfermedades crónicas agravan los efectos del calor,
sobre todo, las cardiacas, pulmonares o del hígado.
·
Especial cuidado cuando se toman medicamentos para tratar,
diuréticos, antihipertensivos o antidepresivos.
·
Las personas con problemas de memoria, comportamiento o
dificultad para orientarse no son capaces de poner remedio a necesidades tan
básicas como la sed, o la sensación de calor excesivo.
Con la bebida y la comida:
·
Beba lo más posible, incluso sin sed. La mejor bebida es el
agua, a temperatura ambiente, no demasiado fría. Los zumos de fruta, la leche,
o sopas frías como el gazpacho nos ayudan a estar bien hidratados.
·
No abuse de las bebidas excitantes como el té o el café.
·
Evite las comidas calientes, pesadas y copiosas.
Manténgase fresco
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Finalmente, Especial atención si... tiene
·
Nauseas
·
Dolor fuerte de cabeza
·
Cansancio extremo o fatiga
·
Sed intensa
·
Calambres en las piernas, brazos o vientre.
·
Piel caliente o temperatura muy alta
·
Convulsiones
·
Agitación no habitual por las noches
Cómo actuar:
Si observan estos
síntomas, llame a los servicios de Urgencias, parece que su organismo no puede
controlar su temperatura. Mientras llega la ayuda puede mejorar el estado de la
persona:
·
Déjela o túmbela en un lugar fresco.
·
Procure que tenga los pies elevados en relación al resto del
cuerpo.
·
Aplíquele paños frescos y mojados, en la piel, especialmente
la cabeza, las ingles y las axilas y abaníquela o use un ventilador.
·
Ofrézcale pequeños tragos de agua.
